Leche de almendra, como se hace.
La leche de almendra es una alternativa a la leche con lactosa que usan tanto los intolerantes o alérgicos a la lactosa, como las personas que siguen dieta de tendencia vegetariana.
Las leches de almendra industriales que
se compran ya hechas suelen traer muchisimo azúcar entre sus
ingredientes además de aditivos químicos que hacen la mezcla estable,
pero es tan sencilla de hacer que merece la pena que la pruebes.
Ingredientes:
Almendras
Agua
Sal
Edulcorante al gusto
Vainilla (opcional) Lo primero es poner las almendras ya peladas y lavadas a remojo durante al menos 8 horas. Desechamos esa agua que contiene ácido fítico y ponemos en la batidora las almendras y añadimos el doble de cantidad de agua.
Lo bueno de realizar la receta tu mismo es que puedes escoger el grado de densidad, si la prefieres más suave solo tienes que añadir más agua.Batimos las almendras con el agua por al menos 3 minutos.
Antes de colarla puedes añadirle vainilla y/o edulcorante. Y lo siguiente es colarla. Si vas a usarla para cocinar puedes colarla con un colador, no importará que la textura sea más rugosa (sobre todo si son helados), pero si vas a consumirla bebida, ya sea sola o en batidos es mejor que la cueles usando un paño o gasa, el resultado es mucho más “profesional”.
Una vez colada, listo, ya tienes leche de almendra mucho más barata y a tu gusto.
Esta leche es, al igual que las almendras, baja en hidratos, con muchas grasas insaturadas y alto contenido en fibra. Es alta en omega 6 y también en vitamina E y niacina (Vitamina B3) Aparte de minerales nos aporta cobre, manganeso, magnesio y fósforo.